Esta semana hemos leído el texto de Javier Onrubia titulado:" Aprender y enseñar en Entornos Virtuales: Actividad conjunta, Ayuda Pedagógica y Construcción del conocimiento".
Antes de empezar a leer dicho texto decidimos buscar información acerca del autor para hacernos una idea sobre lo que investiga y descubrimos que Javier Onrubia es doctor en Psicología y profesor titular del Departamento de Psicología Evolutiva y e la Educación de la Universidad de Barcelona.
Actualmente, su líneas de investigación son sobre los procesos de interacción, comunicación y aprendizaje en entornos educativos presenciales, semipresenciales y en línea y en la innovación de la docencia Universitaria. Además ha publicado artículos en numerosas revistas científicas y ha desarrollado diversas actividades de formación permanente relacionadas con adaptaciones curriculares y atención a la diversidad.
REFLEXIÓN
Los entornos virtuales de aprendizaje son herramientas que han llegado para quedarse, se trata de herramientas muy útiles por medio de las cuales los alumnos/as pueden realizar diversas tareas en línea y en muchas ocasiones actividades que les motivan.
Pero existe por parte del profesorado un "miedo" hacia dichos entornos, ya que visto a simple vista, son entornos que ven como una amenaza a su profesión, ya que en dichos entornos existe una diversidad de actividades que realizar sin que el profesorado este presente.
Este miedo docente viene dado por el desconocimiento ante dichos entornos. Un entorno virtual es una herramienta que ayuda al profesorado aunque la herramienta por si sola no suele generar un aprendizaje al alumnado, si no que debe haber un docente detrás que desarrolle nuevas actividades, que ayude a que dicha herramienta tenga un aprendizaje en el alumno/a.
Las TIC pueden ayudar a mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje, pero por si solas no pueden garantizar que dicha mejora se de. El docente debe aprender a ver los Entornos Virtuales de Educación como una nueva posibilidad de que sus alumnos/as aprendan aunque no estén dentro del aula y que el mismo puede guiar dicho aprendizaje sin tener que estar en dicha aula.
Como el texto refleja los Entornos Virtuales dan la posibilidad de practicar en todo momento lo que se llama "construcción conjunta", es decir que profesor/a y alumno/a realizan unas actividades en conjunto de forma que se benefician los dos por igual. Este modelo de construcción conjunta es muy importante que los docentes lo entiendan y lo desarrollen.
Un docente que entiende y utiliza a diario los entornos virtuales de educación puede mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje a sus alumnos/as, ya que por ejemplo a través de una actividad realizada en clase puede a través de un blog generar un debate donde todos sus alumnos/as participen en sus horas libres, creando por lo tanto un espacio de debate y pensamiento crítico que mas tarde puede llevar al aula.
Pero para que esto ocurra es necesario formar y concienciar al profesorado, es necesario que profesores tengan una formación acerca de los entornos virtuales y sepan utilizarlo para sacarles el máximo partido.
Llevar los Entornos Virtuales a todas las aulas sería una tarea muy complicada. No solo porque sería necesario cambiar la metodología docente de muchos profesores, si no que también habría que cambiar la forma de evaluación a la que el docente está acostumbrado.
Los entornos virtuales como nos dice el texto no nos dan una educación neutra, ya que dentro de ellas no se pueden realizar todo tipo de actividades, si no que estamos limitados, por ello es necesario tener en cuenta dicho aspecto a la hora de evaluar.
A la hora de evaluar los entornos virtuales es necesario abandonar el estilo tradicional de evaluación, y realizar la evaluación desde dos puntos de vista distintos.
El primer punto que debemos evaluar es la calidad del entorno virtual con el que hemos trabajado a lo largo del curso, es necesario realizar un análisis crítico acerca de la herramienta, es decir darnos cuenta de si el entorno virtual está aportando beneficios a los alumnos/as del proceso de enseñanza-aprendizaje o no.
El segundo punto que debemos evaluar es si el alumnado ha aprovechado la herramienta como le ha sido indicada o no, para esto no podemos seguir el método tradicional, si no que será necesario crear unas líneas por las que evaluar, como el nivel que han logrado alcanzar los alumnos/as, si han utilizado las herramientas de una forma adecuada o no.
En conclusión, los Entornos Virtuales son herramientas que pueden ser muy útiles en el proceso de enseñanza-aprendizaje del alumnado, pero que por si mismas no pueden realizar dicha tarea, si no que es necesario que el docente ayude y acompañe en todo momento al alumnado y cree nuevas situaciones a través de los entornos virtuales de aprendizaje. Además es necesario que evaluemos dichos entornos virtuales fijándonos primero en las posibilidades que nos dan dichos entornos virtuales y en segundo lugar como si los alumnos/as han logrado con el poyo del profesorado ha logrado aprender aquello que se quería.
LINK DEL TEXTO: https://www.um.es/ead/red/M2/conferencia_onrubia.pdf